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NUESTRA SEÑORA DEL PILAR

La Virgen del Pilar

 

 La Virgen del Pilar es una advocación mariana de la Iglesia católica, cuya imagen tiene su principal centro de culto en la Catedral Basílica del Pilar de Zaragoza.

 El 20 de mayo de 1642, el municipio de Zaragoza proclamó a la Virgen del Pilar patrona de la ciudad, patronazgo que se extendió a todo el Reino de Aragón en las Cortes aragonesas de 1678. Acumula otros patronazgos, como el del Cuerpo de la Guardia Civil, Cuerpo de Correos y Telégrafos, Cuerpo de secretarios, interventores y depositarios de administración local, Sociedad mariológica, Consejo superior de misiones y del Arma Submarina de la Armada Española.

 En 1908 mediante un Real Decreto se la declara Capitana General del Ejército español y el 24 de junio de 1948 se eleva a categoría de Basílica el Pilar por Pio XII.

 La leyenda sobre sus orígenes se remonta al año 40, cuando, de acuerdo con la tradición cristiana, el 2 de enero la Virgen María se apareció a Santiago Apóstol en Caesaraugusta. María llegó a Zaragoza en carne mortal, antes de su Asunción, y como testimonio de su visita habría dejado una columna de jaspe conocida popularmente como el Pilar. Se cuenta que Santiago y los siete primeros convertidos de la ciudad edificaron una primitiva capilla de adobe a orillas del Ebro. Este testimonio es recogido por un manuscrito de 1297 que se custodia en el Archivo del Pilar. La devoción mariana comenzó en los albores del siglo XIII, cuando comenzaron las primeras peregrinaciones a Santa María la Mayor.

 Sobre la iglesia mozárabe preexistente, se erige el templo románico del Pilar, poco después de la conquista de Zaragoza por Alfonso I el Batallador, que fue culminado en el siglo XIII. En esta época se documenta en el templo una capilla primitiva para alojar el Pilar y en 1293 el templo se encontraba en tan mal estado que el obispo Hugo de Mataplana promovió su restauración y su conversión en la colegiata gótico-mudéjar de Santa María la Mayor con recursos de una bula de Bonifacio VIII que por vez primera menciona la advocación del Pilar.​ Actualmente el único vestigio conservado del templo románico es el tímpano de la iglesia, que ha sido colocado en la fachada sur de la basílica barroca.